Dime la historia de Cristo,
cuéntamela al corazón;
dime, de amor infinito,
es la más dulce canción.
Dime de cómo cantaron
ángeles cuando nació,
“Paz a la tierra ha llegado,
gloria en los cielos a Dios.» (bis)
Penas sufría, trabajos,
y solo en su tentación,
en el desierto ayunaba,
era del mal Vencedor;
siendo “Varón de dolores”,
nuestros dolores sufrió;
le desecharon los hombres
y desdeñaron Su amor. (bis)
En la vil Cruz le clavaron,
¡oh qué terrible dolor!
Pero en amor admirable
hizo la gran redención.
En el oscuro sepulcro
sale invencible Su amor.
Hoy en Su Trono de gloria,
reina en amor salvador. * (bis)