A raíz del terremoto que afectó a la República de Haití, un grupo de iglesias bautistas dominicanas han aunado esfuerzos junto con la Fundación Esperanza Internacional para apoyar las labores de socorro a los heridos y reconstrucción de la nación, y sobre todo ministrar espiritualmente a los afectados. Estas iglesias son:
• Iglesia Bautista del Nuevo Pacto
• Iglesia Bíblica de la Trinidad
• Iglesia Bíblica del Señor Jesucristo
• Iglesia Fundamento Bíblico
Para facilitar las labores que estamos realizando, hemos decidido operar bajo el nombre de Iglesias Bautistas Sirviendo a Haití, y también crearemos un logo que nos identifique.
A través de los viajes que han realizado varios de nuestros pastores y miembros después del seísmo, hemos podido constatar la realidad que está viviendo el pueblo haitiano, especialmente en Puerto Príncipe y sus alrededores. Algunos de los aspectos cruciales son:
• Miles de las casas de nuestros hermanos y el pueblo en general están destruidas y otras están muy agrietadas e inhabitables. Multitudes están durmiendo en las calles y plazas de la ciudad.
• Muchos cadáveres pudieron ser vistos en plena calle, mientras que una cantidad no determinada permanece aun bajo los escombros de los edificios derruidos.
• El servicio de electricidad está interrumpido y el transporte es difícil.
• Un número muy alto de supervivientes tuvieron que sufrir amputaciones de sus miembros a causa de las lesiones sufridas.
• Muchos están viviendo en estado de shock y con depresión ante la enorme magnitud de la tragedia sufrida.
• Cientos de miles de personas han abandonado la capital para desplazarse hacia el interior del país.
En el marco de varios viajes a Haití, hemos llevado a cabo las siguientes iniciativas:
• Establecer una base de operaciones en Puerto Príncipe, con el personal y recursos requeridos para organizar los trabajos.
• Coordinar esfuerzos con varios pastores de Puerto Príncipe, quienes nos están ayudando a identificar las necesidades de las iglesias y de la comunidad.
• Enviar y distribuir un primer cargamento de casi 6.000 cajas de alimentos, así como agua, lonas y colchones.
• Brindar servicios médicos a los heridos y enfermos.
Nuestras próximas acciones previstas son las siguientes:
• Continuar enviando alimentos, agua, medicinas y otros artículos de primera necesidad, para los damnificados.
• Seguir apoyando operativos médicos e iniciativas relativas a la salud, incluyendo purificadores de agua.
• Provisión de lonas para los que no tienen techo, antes de que empiece la temporada de lluvia.
• Ayudar a organizar cuadrillas de hermanos haitianos que puedan trabajar en la demolición de ruinas y recogida de escombros. Estamos comprando picos, carretillas y cinceles para equipar dichas cuadrillas. La Organización de las Naciones Unidas ha provisto palas mecánicas que recogen los escombros de los bordes de las calles, así que es necesario sacarlos hasta allí.
• Organizar una conferencia para pastores durante el mes de marzo, que ayude a esos ministros de Dios a consolar y alentar a las ovejas que están bajo su cuidado. Los temas a tratar serían: una perspectiva cristiana de la tragedia; consejería bíblica en tiempos de crisis; la doctrina de la esperanza.
Aquellas iglesias, organizaciones y personas particulares que deseen involucrarse, apoyando la labor que estamos realizando, podrían hacerlo de las siguientes formas:
• Donaciones en efectivo. Las cuáles serán utilizadas principalmente para: paquetes de comida, camas, lonas, kits de limpieza de los escombros, transporte.
• Trabajadores voluntarios, especialmente médicos, que puedan integrarse a los operativos de socorro a los heridos. Por ejemplo, la Iglesia Bíblica de la Trinidad ha habilitado 15 camas para acoger a los pacientes que salen de alta de los diferentes hospitales, los cuales tienen amputaciones, huesos rotos y contusiones diversas.
• Oración al Señor para que nos imparta sabiduría en todo este trabajo y que multiplique los recursos, ante tantas necesidades.
Es de crucial importancia que resaltemos que dada la magnitud de esta catástrofe, estamos visualizando esta labor a largo plazo. Después de superadas las urgencias iniciales, estamos persuadidos que será necesario brindar apoyo durante años a los esfuerzos de restauración y desarrollo de Haití, lo cual queremos hacer en el marco de la cosmovisión cristiana, y con la mira puesta en la propagación del Evangelio y el avance del Reino de Dios.
En el amor de Cristo,
IGLESIAS BAUTISTAS SIRVIENDO A HAITÍ
• Iglesia Bautista del Nuevo Pacto
• Iglesia Bíblica de la Trinidad
• Iglesia Bíblica del Señor Jesucristo
• Iglesia Fundamento Bíblico
Para facilitar las labores que estamos realizando, hemos decidido operar bajo el nombre de Iglesias Bautistas Sirviendo a Haití, y también crearemos un logo que nos identifique.
A través de los viajes que han realizado varios de nuestros pastores y miembros después del seísmo, hemos podido constatar la realidad que está viviendo el pueblo haitiano, especialmente en Puerto Príncipe y sus alrededores. Algunos de los aspectos cruciales son:
• Miles de las casas de nuestros hermanos y el pueblo en general están destruidas y otras están muy agrietadas e inhabitables. Multitudes están durmiendo en las calles y plazas de la ciudad.
• Muchos cadáveres pudieron ser vistos en plena calle, mientras que una cantidad no determinada permanece aun bajo los escombros de los edificios derruidos.
• El servicio de electricidad está interrumpido y el transporte es difícil.
• Un número muy alto de supervivientes tuvieron que sufrir amputaciones de sus miembros a causa de las lesiones sufridas.
• Muchos están viviendo en estado de shock y con depresión ante la enorme magnitud de la tragedia sufrida.
• Cientos de miles de personas han abandonado la capital para desplazarse hacia el interior del país.
En el marco de varios viajes a Haití, hemos llevado a cabo las siguientes iniciativas:
• Establecer una base de operaciones en Puerto Príncipe, con el personal y recursos requeridos para organizar los trabajos.
• Coordinar esfuerzos con varios pastores de Puerto Príncipe, quienes nos están ayudando a identificar las necesidades de las iglesias y de la comunidad.
• Enviar y distribuir un primer cargamento de casi 6.000 cajas de alimentos, así como agua, lonas y colchones.
• Brindar servicios médicos a los heridos y enfermos.
Nuestras próximas acciones previstas son las siguientes:
• Continuar enviando alimentos, agua, medicinas y otros artículos de primera necesidad, para los damnificados.
• Seguir apoyando operativos médicos e iniciativas relativas a la salud, incluyendo purificadores de agua.
• Provisión de lonas para los que no tienen techo, antes de que empiece la temporada de lluvia.
• Ayudar a organizar cuadrillas de hermanos haitianos que puedan trabajar en la demolición de ruinas y recogida de escombros. Estamos comprando picos, carretillas y cinceles para equipar dichas cuadrillas. La Organización de las Naciones Unidas ha provisto palas mecánicas que recogen los escombros de los bordes de las calles, así que es necesario sacarlos hasta allí.
• Organizar una conferencia para pastores durante el mes de marzo, que ayude a esos ministros de Dios a consolar y alentar a las ovejas que están bajo su cuidado. Los temas a tratar serían: una perspectiva cristiana de la tragedia; consejería bíblica en tiempos de crisis; la doctrina de la esperanza.
Aquellas iglesias, organizaciones y personas particulares que deseen involucrarse, apoyando la labor que estamos realizando, podrían hacerlo de las siguientes formas:
• Donaciones en efectivo. Las cuáles serán utilizadas principalmente para: paquetes de comida, camas, lonas, kits de limpieza de los escombros, transporte.
• Trabajadores voluntarios, especialmente médicos, que puedan integrarse a los operativos de socorro a los heridos. Por ejemplo, la Iglesia Bíblica de la Trinidad ha habilitado 15 camas para acoger a los pacientes que salen de alta de los diferentes hospitales, los cuales tienen amputaciones, huesos rotos y contusiones diversas.
• Oración al Señor para que nos imparta sabiduría en todo este trabajo y que multiplique los recursos, ante tantas necesidades.
Es de crucial importancia que resaltemos que dada la magnitud de esta catástrofe, estamos visualizando esta labor a largo plazo. Después de superadas las urgencias iniciales, estamos persuadidos que será necesario brindar apoyo durante años a los esfuerzos de restauración y desarrollo de Haití, lo cual queremos hacer en el marco de la cosmovisión cristiana, y con la mira puesta en la propagación del Evangelio y el avance del Reino de Dios.
En el amor de Cristo,
IGLESIAS BAUTISTAS SIRVIENDO A HAITÍ